Los Animes Románticos Más Cautivadores de los Últimos Tres Años: Un Viaje Filosófico a Través del Amor (sin spoilers)

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Como escritor aficionado a la filosofía, he observado con fascinación cómo el anime romántico contemporáneo ha evolucionado para convertirse en un medium que no solo entretiene, sino que explora profundas cuestiones existenciales sobre el amor, la identidad y la condición humana. Los últimos tres años han sido particularmente ricos en producciones que trascienden los límites del entretenimiento para adentrarse en territorios filosóficos que habrían fascinado a pensadores clásicos como Platón, Aristóteles y Nietzsche.

Yubisaki to Renren (2024): El Encuentro Silencioso del Alma

Esta obra maestra de 2024 nos presenta a Yuki Itose, una universitaria con discapacidad auditiva, y su encuentro transformador con Itsuomi Nagi. La narrativa trasciende las barreras físicas para explorar un amor que encuentra su expresión más pura en la comunicación no verbal, recordándonos inevitablemente a la concepción platónica del amor como reconocimiento del alma del otro.

La filosofía platónica sostiene que «el amor es el deseo de poseer siempre el bien» , y en Yubisaki to Renren vemos cómo esta búsqueda del bien se materializa en la comprensión mutua que trasciende las limitaciones sensoriales. Yuki e Itsuomi encarnan la idea de que el amor verdadero reside en el reconocimiento de la belleza del alma más que en lo meramente físico, como afirmaba Platón: «No se ama con el cuerpo, sino que se busca el amor a la belleza del alma».

Comparativamente, podemos encontrar ecos de esta comunicación trascendental en la literatura universal con Helen Keller y su maestra Anne Sullivan, donde el amor pedagógico se transformó en una comunicación que superaba las barreras físicas para alcanzar la comprensión espiritual.

Al final el anime me aburrió y no terminé de verlo, pero sin duda la idea principal del argumento es muy valiosa, sólo creo que no hubo un buen desarrollo de personajes.

My Dress-Up Darling (2022-2025): La Autenticidad Existencial en el Amor

La relación entre Wakana Gojo y Marin Kitagawa en My Dress-Up Darling presenta una exploración fascinante del concepto existencialista de autenticidad. Gojo, inicialmente reprimido por el juicio social sobre su pasión por las muñecas tradicionales, experimenta una liberación existencial cuando encuentra en Marin a alguien que no solo acepta sino celebra su autenticidad.

Esta dinámica refleja profundamente el pensamiento existencialista, particularmente las ideas de Jean-Paul Sartre sobre la «mala fe» y la «autenticidad». Gojo había vivido en lo que Sartre llamaría «mala fe», negando su verdadera pasión para conformarse con las expectativas sociales. Marin representa el catalizador que le permite abrazar su proyecto existencial auténtico.

La obra también dialoga con la filosofía nietzscheana del «llegar a ser quien se es». Friedrich Nietzsche argumentaba que «amor significa plenitud y que implica una renuncia al egoísmo en beneficio del otro» , y vemos esto materializado cuando Gojo renuncia a su aislamiento autoimpuesto para ayudar a Marin a realizar sus sueños de cosplay, mientras ella, a su vez, lo ayuda a encontrar su verdadero yo.

En la literatura universal, podemos trazar paralelos con el Pigmalión de George Bernard Shaw, donde la transformación mutua de los protagonistas revela las capas más profundas de su humanidad, aunque en My Dress-Up Darling la transformación es recíproca y voluntaria, no unilateral.

Sin duda fue uno de los animes favoritos de los últimos años.

Kaguya-sama: Love Is War (2019-Presente): La Dialéctica Hegeliana del Amor

Kaguya Shinomiya y Miyuki Shirogane en Kaguya-sama: Love Is War ES UNA OBRA MAESTRA que representan una de las exploraciones más sofisticadas de la dialéctica del poder en las relaciones amorosas. Su «guerra» psicológica por lograr que el otro confiese primero refleja la dialética hegeliana del amo y el esclavo, donde cada uno busca el reconocimiento del otro sin sacrificar su propia dignidad.

Georg Wilhelm Friedrich Hegel, aunque no citado directamente sin duda es una de las fuentes de referencia de esta obra, creo que él habría encontrado fascinante esta dinámica donde ambos protagonistas buscan la síntesis de su amor a través de la tesis y antítesis de sus estrategias románticas. La serie explora cómo «el amor trae conflictos y frustraciones, pero tiene valores que nos permiten llevar una vida auténtica, en relación con libertad, poder, autenticidad y ansiedad».

El orgullo de Kaguya, arraigado en su posición social aristocrática, y el complejo de inferioridad de Miyuki basado en su origen humilde , crean una tensión que refleja las ideas de Nietzsche sobre el amor como «voluntad de poder». Para Nietzsche, «Amor es el sentimiento de la propiedad o de aquello que nosotros queremos convertir en propiedad nuestra» , pero la serie trasciende esta visión posesiva para mostrar cómo el amor auténtico requiere vulnerabilidad y renuncia al control.

Los paralelos literarios se encuentran en las obras de Jane Austen, particularmente en Elizabeth Bennet y Mr. Darcy de «Orgullo y Prejuicio» , donde las diferencias de clase y el orgullo personal crean barreras similares que solo el amor auténtico puede superar.

Watashi no Shiawase na Kekkon (2023): El Matrimonio como Redención Existencial

Esta serie explora el matrimonio arreglado entre Miyo y Kiyoka como un camino hacia la redención personal y la autodeterminación. La narrativa se adentra en territorio existencialista al presentar el matrimonio no como una institución social opresiva, sino como una oportunidad para la autorrealización mutua, aún cuando Miyo me desespera su crecimiento como personaje es fascinante.

La experiencia de Miyo refleja el concepto existencialista de «situación»: ella se encuentra «arrojada» (en términos heideggerianos) en una situación familiar opresiva, pero encuentra en su matrimonio con Kiyoka la posibilidad de «proyectarse» hacia una existencia auténtica. Esta transformación resuena con las ideas de Simone de Beauvoir sobre la liberación femenina a través de la elección y la autodeterminación.

El paralelo literario más evidente es con Jane Eyre de Charlotte Brontë , donde el matrimonio se convierte en un acto de liberación y reconocimiento mutuo entre iguales, más que en una subordinación tradicional.

Horimiya (2021): La Multiplicidad del Ser y el Amor Auténtico

Aunque estrictamente anterior a nuestro marco temporal de tres años, la influencia de Horimiya en las producciones posteriores es innegable. La serie presenta la idea revolucionaria de que todos llevamos múltiples identidades: la pública y la privada, y que el amor auténtico surge cuando permitimos que el otro vea todas nuestras facetas.

Kyoko Hori y Izumi Miyamura encarnan la complejidad existencial del ser humano moderno. Hori, popular en la escuela pero cargada de responsabilidades domésticas, y Miyamura, percibido como un otaku melancólico pero que esconde una personalidad rebelde con tatuajes y piercings, representan la multiplicidad del ser que los filósofos existencialistas como Sartre exploraron en profundidad.

Esta multiplicidad del ser resuena con el concepto aristotélico de que «la verdadera amistad implica reciprocidad y deseo del bien del otro». Su relación trasciende las expectativas sociales para encontrar una conexión auténtica basada en la aceptación total del otro.

El Existencialismo y la Búsqueda de Autenticidad

Los animes románticos contemporáneos reflejan profundamente la tradición existencialista que «se interesa en reflexionar sobre el sentido de la existencia y de la muerte, por encima de cuestiones abstractas que supuestamente encubren los conflictos del hombre». Los protagonistas de estas series enfrentan crisis de identidad y autenticidad que solo resuelven a través del encuentro amoroso.

Jean-Paul Sartre sostenía que «la existencia precede a la esencia» , y vemos esto materializado en personajes como Gojo de My Dress-Up Darling, quien no descubre quién es hasta que encuentra a Marin, o Miyo en Watashi no Shiawase na Kekkon, quien encuentra su esencia a través de la relación con Kiyoka.

Paradójicamente, a pesar de su modernidad, estos animes mantienen elementos del romanticismo literario del siglo XIX. Los «autores del romanticismo» como Víctor Hugo, Gustavo Adolfo Bécquer y Lord Byron exploraron el amor como fuerza transformadora y sublime, tema que persiste en estas obras contemporáneas.

El romanticismo «fue un movimiento literario y artístico desarrollado en la primera mitad del siglo XIX» que enfatizaba la emoción sobre la razón, la individualidad sobre la conformidad, y el amor como experiencia trascendente. Estos elementos perviven en los animes contemporáneos, donde el amor sigue siendo presentado como una fuerza capaz de transformar completamente la existencia de los protagonistas.

La influencia de Platón en estas narrativas es innegable. Su teoría del amor como «estado de éxtasis y a la vez de moderada frustración» se manifiesta en la tensión romántica de series como Kaguya-sama, donde la imposibilidad temporal de la confesión crea precisamente esa dinámica de éxtasis y frustración que Platón identificó como característica del amor auténtico.

El concepto platónico de que el amor «es un impulso que nos lleva a querer ir más allá de lo material en nuestra experimentación de algo, en el acceso a su belleza» se refleja en cómo estos animes presentan el amor como una fuerza que trasciende las apariencias físicas para conectar con la esencia del otro.

Conclusión: El Anime Como Filosofía Aplicada

Los animes románticos de los últimos tres años representan mucho más que entretenimiento; constituyen una forma contemporánea de filosofía aplicada que explora las cuestiones fundamentales de la existencia humana a través de narrativas accesibles y emocionalmente resonantes.

Estas obras demuestran que el amor, lejos de ser un simple sentimiento, es un fenómeno filosófico complejo que involucra cuestiones de identidad, autenticidad, libertad y trascendencia. Al dialogar con tradiciones filosóficas milenarias mientras abordan preocupaciones contemporáneas, estos animes continúan la gran tradición de la literatura universal de usar el amor como vehículo para explorar los misterios más profundos de la condición humana.

En última instancia, estos animes nos recuerdan que, como escribió Nietzsche, «el amor perdona a su objeto el deseo mismo» , sugiriendo que el amor auténtico trasciende las limitaciones del ego para alcanzar una comprensión más profunda de nosotros mismos y del otro. En un mundo cada vez más fragmentado, estas narrativas ofrecen la esperanza de que el encuentro auténtico con el otro sigue siendo posible, y que a través de él, podemos descubrir no solo quién es el otro, sino quiénes somos nosotros mismos.

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